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Entrevista a Amparo López

Entrevista a Amparo López <p style="text-align: justify;"><strong>&iquest;C&oacute;mo han surgido estos encuentros familiares? </strong><br />En la Parroquia llevamos varios a&ntilde;os intentando que funcionase la pastoral familiar, se han visto varias maneras y parece que estos encuentros est&aacute;n dando buenos resultados. <br /><br /><strong>&iquest;En qu&eacute; consisten estos encuentros para que las familias que tengan inter&eacute;s puedan participar?</strong> <br />Pues hacemos la convocatoria un domingo al mes coincidiendo con el domingo que celebramos la Eucarist&iacute;a para ni&ntilde;os. A las diez de la ma&ntilde;ana quedamos padres/madres e hijos y desayunamos juntos conviviendo un ratito, a las 11 horas celebramos todos juntos la Eucarist&iacute;a con ni&ntilde;os y al terminar los adultos pasamos al sal&oacute;n de actos, para asistir a una charla-coloquio de un tema de actualidad para la familia, suele durar sobre una hora y entre las 13 y los 13&acute;30 horas terminamos. <br /><br />Los temas que llevamos tratados en la charla-coloquio son: Valores religiosos en la familia, la comunicaci&oacute;n entre la pareja y con nuestros hijos, educar a nuestros hijos educ&aacute;ndonos nosotros, y el pr&oacute;ximo d&iacute;a 26 de Febrero el tema ser&aacute; &ldquo;La Familia y los medios de comunicaci&oacute;n&rdquo;. Los ni&ntilde;os pasan hacer distintos talleres con unas monitoras voluntarias muy agradables, entre los ni&ntilde;os tambi&eacute;n hay muy buen ambiente, se divierten mucho y aprenden a compartir. <br /><br /><strong>&iquest;Por qu&eacute; crees qu&eacute; es tan necesario el ayudar a los padres en la labor de educar y de reforzar lo que es la familia? </strong><br />Porque tengo la plena seguridad que en un hogar, sea mono parental o sea la familia tradicional es donde la catequesis dom&eacute;stica puede hacer que nosotros como personas adultas y con nuestros hijos podamos revivir valores que vamos perdiendo, bien por el tipo de vida que llevamos de estr&eacute;s, de consumo, de falta de tiempo para nosotros y para nuestros peque&ntilde;os y mayores. Vamos pasando el tiempo sin pararnos a pensar en la posibilidad de encuentro que tenemos cada d&iacute;a que amanece, no nos detenemos a interpretar cada mensaje que Dios nos manda y que ese mensaje nos sirva para revitalizar nuestra vida hacia los dem&aacute;s y estimular nuestro camino de fe cristina. <br /><br />Nos cuesta ser coherentes y atender a lo que Dios nos pide a cada uno a trav&eacute;s de tantas oportunidades que el d&iacute;a nos ofrece. No nos damos cuenta de lo fr&aacute;giles que somos, de lo que necesitamos la fe, y lo que nuestra fue nos puede ayudar y acompa&ntilde;ar toda nuestra vida. <br /><br /><strong>&iquest;T&uacute; crees que todo esto que queda tan bonito puede ser una realidad y que se puede conseguir con los encuentros familiares?</strong> <br />Ayuda mucho prepararte, formarte, hacer crecer tu fe, caer en la cuenta de la necesidad de una familia, &iexcl;claro que ayuda!, cuando estas escuchando una charla estas analizando tu vida y vas cayendo en la cuenta de muchas cosas que ni te hab&iacute;as parado a pensar o que hab&iacute;as dejado de plantearte y luego dialogas con otras personas que tienen tus mismas inquietudes, o con otras que ya sufrieron la adolescencia de sus hijos, e intercambiamos nuestras experiencias, todas muy enriquecedoras. <br /><br />Porque a todos nos inquieta crecer como personas y conocer a nuestros hijos y aceptarlos y eso implica: Ser consciente de su proceso de crecimiento para acompa&ntilde;arles mejor, saber descubrir con cari&ntilde;o sus problemas, sus inquietudes, observar sus reacciones y preferencias, conocer las diversas influencias que est&aacute;n gravitando sobre ellos, valorar objetivamente sus cualidades, comprender y dar confianza ante sus deficiencias, entender el mensaje de su comunicaci&oacute;n, prevenir sus momentos dif&iacute;ciles, respetar su personalidad en la medida de lo posible, su libertad, aprovechar sus cualidades para potenciarlas, evitar comparaciones, alegrarse por sus cambios y crecimiento, ofrecer confianza, alabar sus logros y proyectos, animarlos con frecuencia, creyendo en sus posibilidades, dialogar sobre sus cosas, etc&hellip;.<br /><br />Ya que nuestros hijos son como los r&iacute;os de vida, que avanzan a trav&eacute;s de la pluralidad de paisajes &ndash;agrestes y hermosos, apacibles y borrascosos- por los que recorre su existencia. Y ante ese r&iacute;o que corre, los padres debemos permanecer en la orilla, contemplando su paso, pero ayudando abrirse camino, guiando su curso, en una actitud vigilante, de respeto y confianza y sin falsos miedos, encauzando su caudal espiritual y fortaleciendo su fe. <br /><br /><strong>&iquest;Qu&eacute; dir&iacute;as a las familias que todav&iacute;a no se han unido a estos encuentros? </strong><br />Que hagan un hueco en sus quehaceres, que dejemos otras cosas y faenas del hogar, para ocuparnos durante un rato de nuestra formaci&oacute;n, para formarnos y capacitarnos para una mejor convivencia, que nuestro trabajo no sea solo exterior sino interior, compartir ideas, formarnos aunque sea durante un rato. Merece la pena estar un rato disfrutando, aprendiendo y aportando.<br /><br /> Aprovechemos esta oportunidad que se nos brinca. Las personas que participan en estos encuentros est&aacute;n muy contentas, incluso algunos que tienen familia fuera aprovechan para quedarse el fin de semana del encuentro, dicen que les est&aacute;n ayudando y que est&aacute;n resultando muy bien y que se sienten muy a gusto.</p>
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