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Día 26

Día 26

Hoy es un día especial para sacar conclusiones y para expresar vuestros deseos de continuidad. Ayer pasábamos una hojita para que cada uno/a pueda expresar sus deseos.

También prepararemos en los Grupos la Asamblea del sábado. Es una manera de que podamos dar pistas para que la parroquia pueda organizar aquellos servicios que pensamos son más necesarios y que sólo se podrán organizar si hay personas que están dispuestas a participar.

  • Igual que ayer, la Misa-Eucaristía de Misión a las 9 de la mañana.
  • A las 9’30 la oración; como ayer. Luego toda la mañana (hasta las 13h) hay exposición con el Santísimo (según la costumbre). Por eso en la oración nos detendremos meditando y celebrando este aspecto importante de nuestra fe: Se hizo Pan.
  • Quizá con relación a los jóvenes hay algo de confusión. Por eso, lo mejor será mantener los horarios habituales:
    • A las 7, como la semana pasada, se juntarán los chavales de la ESO y los de Confirmación.
    • A las 8, como toda esta semana, el grupo joven.
  • A los Grupos de Encuentro les toca hoy celebrar, preparar la Asamblea y expresar susdeseos de continuidad. ¡Feliz fiesta! (Hoy es, de momento, el último día de grupos).
  • El hermoso grupo de hombres que comenzó a reunirse en casa de Jesús vuelven a reunirse hoy a las 8 en la parroquia en el mismo salón que el miércoles pasado.
  • Y no olvidéis que a las 9 de la noche nos seguimos juntando el grupo de parejas y de medias naranjas más o menos jóvenes. Quienes tenéis interés porque continúe este grupo no dejéis de asistir hoy. ¡Tenemos que apuntar hacia el futuro! Un futuro renovador para nuestra parroquia y para vuestras familias.
  • ¡Ah! Como algunos lo han preguntado, la Asamblea del Sábado será a las 6 de la tarde en la iglesia con la presencia del Sr. Obispo.

Y hoy sí; hoy sí que nos toca rezar por nuestros grupos:

Oración por nuestro grupo

“Donde están dos o tres reunidos en mi nombre
allí, en medio de ellos, estoy yo”.

Estas palabras son nuestra fuerza.
Nosotros nos reunimos en tu nombre.
Estamos unidos, porque nos has llamado Tú.

Tú has pronunciado nuestros nombres.
Nos has dicho a cada uno:
“Ven y sígueme”.

Tu nos has agrupado en una comunidad.
Y nos dices cuando estamos reunidos:
“Vosotros sois mis amigos”.

Tú vas a la cabeza de nuestro grupo;
nos envías con tu mensaje vivo;
Nos regalas tu Espíritu y nos dices:
“Estoy con vosotros día a día”.

Ahora, en medio de la marcha, te pedimos:
¡Acaba en cada uno de nosotros
la obra que has empezado!

¡Haznos sensibles a tu voz,
no fríos y cerrados cual nuevos fariseos!

¡Haznos tierra buena, honda y mullida,
para que la semilla encuentre fondo y fructifique!

¡Empástanos en tu amor,
para que seamos un grupo cálido y dinámico!

 

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