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La celebración de sus bodas de oro sacerdotales

La celebración de sus bodas de oro sacerdotales <p>El pasado domingo, 19 de marzo la comunidad parroquial acompaño a D. Justo Castaño Reolid, vicario parroquial, en la celebración de sus Bodas de Oro sacerdotales. Con él han concelebrado ocho sacerdotes, entre ellos estaba Don Luis Marín (Administrador Diocesano). La celebración, en el marco del III domingo de cuaresma, se ha desarrollado en un clima familiar de acción de gracias en el que junto a sus hermanos y familiares han participados representantes de los distintos grupos parroquiales, destacándose de manera especial el coro de adultos que ha puesto el toque de solemnidad a la eucaristía. <p>La homilía comenzó recordado a la Virgen de los Llanos, pues cuando se preparaban los actos de la coronación el 19 de marzo del mismo año, 1956, recibió la ordenación sacerdotal en la Basílica de San Pedro de Roma. Nos habló de su vocación sacerdotal y del sacerdocio en el contexto del Seminario. <p>La homilía ha tenido un toque especial, al hacer referencia de cada uno de los sitios que ha pasado (El Salobral, Alborea, Casas Ibáñez, Chinchilla, El Buen Pastor…), a los párrocos del Buen Pastor con los que trabajo pastoralmente (Don José Baeza, Juan Cárdenas, José Luis Miranda y Luis Enrique) y no podía olvidar a José Maria Melero, vicario parroquial. Dos palabras resumen la homilía. Una “perdón” por los fallos y pecados cometidos a lo largo de estos años, y “Gracias” a Dios y a todas y a aquellas personas que le han acompañado y ayudado en su caminar a lo largo de estos 50 años. <p>En el ofertorio, junto al pan y el vino, los grupos parroquiales con los que él más ha trabajado ofrecieron distintos elementos que simbolizaban el trabajo pastoral realizado con ellos: unos cuadernillos para la vísperas de la Virgen, una bandeja con el óleo de los enfermos y medicamentos, y unos libros de Liturgia para el estudio y comprensión de la liturgia. <p>Al termino de la eucaristía se le ha obsequiado con distintos regalos en los que los miembros de la parroquia han participado. Y como muestra de agradecimiento terminaba diciendo:<i> "decía Luis Enrique que no iba a ver incienso, pero ha habido demasiado, Gracias". </i> <p>Toda la Comunidad Parroquial te desea <b>¡MUCHAS FELICIDADES! y que el Señor te de muchas fuerzas para seguir cumpliendo con la tarea diaria que te ha sido encomendada.</b>
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